¡Buenas lectores! En esta ocasión vengo a hablaros de una trilogía, una sin completar, una que ya tiene enganchados a miles de lectores: Crónicas del Asesino de Reyes. "¿Qué es eso?","a mi ni me suena" lo cierto es que está trilogía es mucho más conocida por el nombre de sus dos libros publicados, El Nombre del Viento y El Temor de un Hombre Sabio. "Ah vale, ya sé cuales son","bah esos ya los ha leído todo el mundo", ahora os suenan más ¿a que sí? Sí que es verdad que a estas alturas ya es una trilogía conocida,pero cuando escribí sobre ella la primera vez no lo era y me gusta tanto que me he decidido a recuperar y adaptar la reseña que ya hice sobre ella. Así pues, aquí la tenéis, para los que queráis afirmaros en vuestra opinión sobre ella y para los que no la conozcáis.
El argumento principal de la trilogía trata
sobre la vida de un enigmático personaje, Kvothe, el cual, aún siendo conocido
por casi todos, tiene una historia desconocida. Al principio del primer libro
Kote, que es el nombre que adopta al hacerse pasar por posadero, se encuentra
con un escribano al que decide contarle su historia. Para eso le dice que
necesitará tres días, por lo tanto el escribano deberá quedarse hospedado en la
posada si quiere escuchar toda la historia. Por ese motivo los libros también
son calificados como días, cada libro, un día contando la historia. Dicha
historia creará bastante intriga, pero más intriga aun la conseguida por el
autor dejando caer, a través de los clientes que regentan la posada, leyendas e
historias de lo que la gente cree que ocurrió. De esa forma es inevitable
cuestionarse que pasará realmente en la historia.
La tan emocionante historia empieza
así:
He robado
princesas a reyes agónicos.
Incendié la ciudad de
Trebon.
He pasado la noche con Felurian
y he despertado
vivo y cuerdo.
Me expulsaron de la Universidad
a una
edad a la que a la mayoría no los dejan entrar.
He recorrido
de noche caminos
de los que otros no se atreven a hablar ni
siquiera de día.
He hablado con dioses, he amado
y he escrito canciones que hacen
llorar a los bardos.
Me
llamo Kvothe.
Quizá hayas oído hablar de mí.
Vosotros mismos juzgareis si intriga o no,
pero comentarios de ese tipo," he hecho cosas...", o "tu hiciste
tal...", "eres el hombre que consiguió lo que nadie..." son
bastante recurrentes en algunas partes del libro en las que la historia se
detiene.Y a mí, personalmente, me intrigaban.
Podría escribirse mucho sobre los personajes de esta trilogía, pero lo cierto es que al ser una historia muy larga hay un montón y no son duraderos, así que solo hablaré de algunos protagonistas.
El más principal como es lógico es el
propio Kvothe, un hombre con un característico pelo rojo como el fuego. Es
bastante serio, incluso podría decirse que guarda una tristeza en su interior,
pero eso es al contar la historia. Durante la misma es un joven alegre,
increíblemente inteligente cuyo propósito en la vida es aprender todo lo que
pueda, en especial sobre los Chandrian (una especie de demonios de las
leyendas), para poder vengar a sus padres.
Otros personajes importante son: Bast, un
ser Fata (unos seres todavía misteriosos) que reside con Kote en su posada, poco se sabe de él, pero es fiel a
su compañero y maestro, y solo espera volver a verle sonreír. Cronista es el
escribano que escribe la historia, no habla mucho y no desvela nada sobre
el.
Si hay algún personaje destacable en la
historia es, sin la menor duda, Denna, puesto que desde que aparece por primera vez, no hace más
que volver a hacerlo en el momento menos esperado. Aunque al igual que otros
personajes, poco se sabe en realidad de ella. Salvo que siempre está
rodeada de hombres y es más impredecible que una tormenta. A estas alturas no hace falta decir que me encanta esta trilogía, es muy de mi estilo (fantasía, aventura...). No voy a negar que al principio puede resultar un poco lento, pero una vez pasada una barrera (ya os daréis cuenta de lo que hablo) mejora muchísimo. Sinceramente a mi me encantó y espero con ansia la tercera entrega. Espero que para quien me lea esta reseña le sea suficiente para decidirse a leer el libro y disfrutar tanto como lo hice yo. Porque no hace falta ser escritor ni experto en literatura para apreciar este libro como una reliquia, un autor que consigue embaucar al lector y una historia que te permite transportarte y olvidarte del mundo que te rodea. Como me gusta decir a mí, un libro que convierte el mínimo rato de lectura en el mejor del día, es un libro que merece ser leído.
Valoración:
- Escritura: 3/5
- Historia: 4.5/5
- Complicidad con los personajes:3.5/5
